Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo"
1° Pedro 5: 6
El Apóstol Pedro, quien había estado al lado de Jesús; el mas grande de los humildes y humillados; (Mt 11: 29 y Fil 2: 6- 9), sabia bien de lo que está hablando aquí.
La humildad es una virtud, y la humillación una actitud.
Y aunque las Escrituras nos revelan que Jesús fue
eximió en las dos; aquí el Apóstol se detiene en la segunda; la humillación.
La humillación que mas tarde dará lugar una exaltación promovida por Dios.
En este caso también; experimentada por Cristo exaltado en gloria.
Como vemos en el texto, Dios no tiene problemas con la exaltación, siempre y cuando halla habido humillación previa y El, esté en el asunto.
A esto se añade el factor "tiempo". Por eso el Apóstol recalca..."cuando fuere el tiempo" (1 Pedro 5: 6)
Los que tienen problemas con la exaltación y con el tiempo de su llegada, son los seres humanos pero no Dios.
Generalmente son ellos los que no están preparados para recibirla, aunque la busquen por sus propios medios con alta desesperación.
Asimismo; cuándo la alcanzan; llegan los problemas con Dios y sus relaciones.
Algunos cambian sus modos, carácter, se marean.
Otros se vuelven déspotas, soberbios u orgullosos.
Esta demostrado que la exaltación no es para cualquiera, y mucho menos para alguien que no aprendió la lección de la humillación.
Es tan peligrosa la exaltación personalista, que muchos abrigados en el orgullo que ella da, no pueden reconocer sus errores; y para su propio mal; huyen de la humillación.
Que es la humillación?
Es la acción que consiste en bajar la cabeza u otra parte del cuerpo en señal de acatamiento y sumisión.
Cuatro perjuicios de la falta de humillación
1. Dios lo abomina y mira de lejos ( Sal 138: 6, prov.16: 5)
2. Anda descarriado.(Sal. 119: 67)
3. Es generador de contiendas.( Prov 28: 25)
4. Dios lo humillara.(Mt 23: 12).
Convengamos que la exaltación es anhelada por todos los hombres. Y no es mala cuando Dios la da.
El tema en cuestión es:
a. ¿Para que la queremos?
b. ¿Como la buscamos? (Métodos para lograrla)
c. Y el insolente reclamo de pretenderla por anticipado, sin haberla ganado. Al no haber sabido esperar el tiempo propicio ni pasado por la humillación.
Entonces este es el orden:
Humillación primero y exaltación después.
Porque es ahí donde un carácter es realmente transformado.
Y donde empieza a contar el tiempo...porque, cuando "fuere el tiempo", nadie debería manipular nada, "cuando fuere el tiempo"; Dios hará los trámites necesarios para una exaltación legítima. Entonces todo estará en su orden, para que te alcancen las Bendiciones.
Nunca podrá ser al revés, sino ahí comenzarán todos los problemas.
DECLARO SOBRE VOS:
▪HUMILDAD SUFICIENTE para cerrarle las puertas al orgullo, reconocer tus errores, y pasar por la HUMILLACIÓN.
▪PACIENCIA SOBRENATURAL para librarte de exaltación humana, y aguardar la EXALTACIÓN DE DIOS.
▪Que la EXALTACIÓN en DIOS, quintuplica tu HUMILDAD, y no hay puerta cerrada que no se abra para bendecirte a vos y a los tuyos, SOBREABUNDANTEMENTE.
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